viernes, 26 de septiembre de 2008

ACERCA DE NEGROS Y AFRODESCENDIENTES (extracto)



ACERCA DE NEGROS Y AFRODESCENDIENTES (extracto)
REFORMADOS Y CONSTITUIDOS

por Luis M. T. Río

Cristóbal Colón, el genocida soñador, creyó haber llegado a las Indias Occidentales y por eso llamó indios a los habitantes originarios de estas tierras, a quienes aún nombran con ese erróneo gentilicio sin que se hay propuesto uno más acorde. Ni el término aborigen proveniente del latín ab origine, que significa “aquellos que vivían en un lugar concreto desde el origen, antes de ninguna colonización”, es utilizado por los académicos, tampoco los antropólogos se interesan por enderezar este entuerto terminológico, conformándose con llamarlos indios americanos o amerindios.

Sin embargo con los negros no pasa lo mismo. A los primeros sobrevivientes de las violaciones coloniales los llamaron mulatos como nombraban a los productos del cruce genético entre caballos y burras que generan el híbrido mula. Los más institucionalizados los bautizaron mestizo (mezclados, impuros) o zambos (de forma irregular, malformado), todas denominaciones clasistas de alto contenido discriminatorio, usados para designar a las castas inferiores de América desde la Colonia.
Cuando las mixturas comenzaron a ser usuales y los tales mestizos y mestizas con su esfuerzo lograron ascender socialmente tras la abolición de la esclavitud (1854), los negros mezclados pasaron a ser morenos, eufemismo social dado por el tono de piel similar al de los moros o morunos, a quienes los españoles despreciaban por ser invadidos y dominados por éstos durante más de seiscientos años.

Con el advenimiento de la independencia, los negros, mulatos, morenos y zambos que habían combatido, derramando su sangre y sudor por la Libertad, obtuvieron tierras y ganado por servirle a la Patria…Para cambiar esta situación, a los astutos mantuanos no les quedó otra opción para recuperar poder y riquezas, que codearse con los nuevos hacendados…, para ello crearon formas sutiles de nombrarlos, designando a los negros menos tostados el calificativo de trigueños, metáfora para describir el color ocre tostado del trigo tras la siega. Este acto hipócrita pervive entre muchos afrodescendientes que rechazan su gentilicio, prefiriendo alisarse el cabello y desteñir su piel. Muchos negros permiten tales halagos hipócritas al no tener motivos para enorgullecerse de su etnia, tras haber padecido por siglos tantas humillaciones.

Después vendría la moda de la denominada CULTURA NEGROIDE, con poco de cultura y mucho de moda. Tal palabra fue admitida por la Real Academia de la lengua española, significando que, entre otras acepciones: “presenta algunos de los caracteres de la raza negra o de su cultura”. Otros “estudiosos” racistas verían la oportunidad de incorporarles componentes antropológicos, al otorgarle a los negros aptitudes distintas a las del resto de los seres humanos, basando estas “cualidades” a la genética, tales como la capacidad para desarrollar velocidad y poseer más fuerza física que las otras razas, PERO CON POCA ESTRUCTURACIÓN PARA LAS CIENCIAS Y LAS ARTES E INCAPACIDAD PARA EJERCER Y DOMINAR TAREAS INTELECTUALES COMPLEJAS COMO EL AJEDREZ O LA ACADEMIA, por sus condiciones “naturales”. Según este designio fascistoide, el ejemplo más clásico lo encarnaría el boxeador norteamericano Cassius Clay al negarse a “honrar a su patria” como soldado durante la guerra de Vietnam, que fue encarcelado y despojado de sus títulos mundiales de boxeo…

Por más clara y lavada que se tenga la piel, alguna parte de nuestra fisonomía delata la raíz africana, y esa cédula de identidad genética siempre nos acompañará en la sangre, en las células y en algún parte del cuerpo, ya sean fosas nasales, el pelo ensortijado, en la boca pulposa, la pisada honda de unos pies gruesos que parecen flotar cuando caminan, corren o bailan los ritmos que brotan de la piel. Además están en las caderas o las nalgas redondas de mujeres y hombres criollos. Todos son rasgos constitutivos de nuestra venezolanidad cobriza.

Algunos manifestarán que cambiar el término NEGRO por AFRODESCENDIENTE es un indicio de avance hacia esa integración, pero no lo creemos así porque los cambios llegarán sólo cuando todos disfruten de las mismas opciones y posibilidad de tomar decisiones individuales y colectivas como venezolanos, sin que esto se plantee como un exotismo y sea común, y nadie se extrañe al ver negros o aborígenes en los sitios claves del alto Gobierno tomando decisiones.


Tomado de: DÍA-CRÍTICA. Revista de crítica cultural. Fundación editorial El perro y la rana. Nov-ene de 2008. No. 3

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Excelente publicacion .....Soy una persona blanca que creo que los afroamericanos son superiores ya que como ya han mencionado en el articulo ellos tienen mas aptitudes fisicas (son mas furtes mas rapidos etc) pero me atrevo a agregar que ello tambien tienen aptitudes cognositivas superiores pero son la raza "dominada" porque los blancos racistas no tienen el corazon que tienen ellos por lo tanto no les importa hacerlos sufrir por sus estupideces racistas.. Amo a los afroamericanos son unas personas increibles y arriba con la igualdad de derechos!!!!!!!!!!

Anónimo dijo...

Excelente publicacion .....Soy una persona blanca que creo que los afroamericanos son superiores ya que como ya han mencionado en el articulo ellos tienen mas aptitudes fisicas (son mas furtes mas rapidos etc) pero me atrevo a agregar que ello tambien tienen aptitudes cognositivas superiores pero son la raza "dominada" porque los blancos racistas no tienen el corazon que tienen ellos por lo tanto no les importa hacerlos sufrir por sus estupideces racistas.. Amo a los afroamericanos son unas personas increibles y arriba con la igualdad de derechos!!!!!!!!!!

Anónimo dijo...

Que pendejada!!! Todos los seres humanos vienen de Africa. Allí surgieron los seres humanos y desde tiempos muy remotos empezaron a emigrar a Asia y a Europa.

Por favor, aún no.